Una vez más la Cía. Cultural-teatral Tres sombreros de copa nos deleita con una comedia, en este caso del autor Pedro Mario Herrero: No le busques tres piernas al alcalde.
"Vemos a un alcalde de pueblo que ganó la guerra y por eso se cree que todo le está permitido. Es jugador, mujeriego y borracho, pero proclama que la moralidad del pueblo es intachable. Así le conviene que parezca para ser elegido diputado. La situación es única: en una juerga nocturna ha perdido su pierna ortopédica no sabe dónde; esto coincide con las fiestas de su pueblo y con la visita de un puritano inspector del gobierno." [DIARIO YA]
"Justifica su título porque el corregidor al que alude tiene una pierna ortopédica. La búsqueda de la importante pieza artificial, que permite al personaje trasladarse de un lado a otro, y que él ha perdido en algún lugar que no recuerda, constituye el hilo que nos conduce a través de una serie de situaciones donde nuevamente Pedro Mario Herrero, gran periodista, prueba su capacidad de fabulación y la eficacia escénica de su humor." [DIARIO ABC]
"La pierna ortopédica del alcalde viene a ser un personaje más de la farsa, ya que el señor alcalde, en sus correrías, se la va dejando por lugares no precisamente ejemplares. Esa pierna ortopédica es la fría conciencia de sus inmoralidades." [DIARIO ALCAZAR]
"El vocabulario del alcalde es pintoresco. Su lema: 'Estacazo y tente en pie'. Él se siente nombrado a dedo y considera que el cura es el 'único comunista del pueblo'. Ve así el contraste con el extranjero: 'Ellos tienes partidos y nosotros, partidas'. Su autodefinición: 'Yo soy liberal, pero no tanto'." [DIARIO YA]
"El alcalde es español. Español es el pueblo que regenta con métodos muy personales, españoles son los problemas de la localidad, y no puede caber duda alguna de que la sátira deslizada por debajo de la comicidad pura tiende a corregir y explicar los mecanismos de una política caciquil que nos resulta muy familiar." [DIARIO ABC]
"Al cacique, sí podemos considerarlo algo típicamente español . El alcalde es un 'animal político' de los de garrotazo y tentetieso. Es el dueño y señor del pueblo , y asimismo parece estar convencido de que todas las inmoralidades del pueblo son perfectamente morales. También asistimos a un desfile de personajes pintorescos que sirven para poner en solfa las ideas y las actuaciones del alcalde en cuestión. Las furcias, las casas de lenocinio y de juego, las infidelidades de todo género, y hasta la llegada de un 'puritano' que luego resulta ser otro desvergonzado más." [DIARIO ALCAZAR]
"La idea del sainete es excelente. Pero el desarrollo, el tratamiento dialéctico, son bastante menos afortunados que los de su obra anterior. Los trazos de ésta son más gruesos, más populacheros, y la pieza está resuelta con mucha más ligereza en el procedimiento escénico. En realidad, todo gira en torno al personaje central que no sale en ningún momento de la escena, en tanto los demás personajes vienen a ser como muñecos que le ayudan a exponer sus ideas bárbaras." [DIARIO ALCAZAR]
"La realidad popular que presenta este autor gira fundamentalmente en torno a tres ejes: religión, política y erotismo. Se trata de una obra que une la comicidad rotunda a la intención crítica de muchos 'modos de ser' típicos de nuestro país." [DIARIO YA]
"El público responde perfectamente a los envites que el personaje principal le hace, lo cual quiere decir que los espectadores rieron con abundancia cordial, y aplaudieron largamente." [DIARIO ABC]