Si nos dejan seremos una sombra más, acompañando a nuestra gente. Seremos la vela encendida en Semana Santa, o la copa de vino en la Feria, o quizás ese telón que se cierra tras la función. No hay nada de extraño en esto, porque desde el primer momento comprendí que estábamos vinculados, que algo infinitamente perdido y distante seguía sin embargo uniéndonos.
¡Qué bonitas fotos, Tomás!
ResponderEliminarLa verdad es que la palabra "bonitas" no las describe exactamente, pues mirando algunas de ellas se percibe el alma que encierran, y ese sentimiento es difícil explicarlo con palabras.
Desde luego sabes captar los momentos y la belleza que transmiten.
Lástima que esta Semana Santa no haya podido dar más de sí por culpa de la lluvia; seguro que en tu cámara habría dado frutos maravillosos.
Pasaré tu enlace a todos los cofrades del Crucificado para que visiten tu blog. Yo entraré regularmente porque me encanta.
Un saludo.
Un saludo Adelaida, y gracias.
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